Aunque
invisible sea a los ojos de la gente.
Puso
la miel en mis labios y sin degustarla siquiera la aleja despacio el destino,
haciendo
más largo y duro el calvario.
Cruel sino que a mi me vino a tocar, similar al tuyo
posiblemente...
Sinuosos caminos tenemos que recorrer, amigos y amigas…
Entrelazados por momentos y tan distantes, en cambio, en otros
muchos instantes.
Mañana, permanecerá tu recuerdo... en ocasiones bueno, en otras
no tanto.
Me embargará la nostalgia entonces, melancolía en la que se
convertirán los anhelos de hoy;
se volatilizarán los sentimientos que alberga mi alma entre
nubes de ensueños y brisa del olvido... Quedando sólo su esencia en un
recóndito lugar, cerrado a cal y canto, en el que jamás se desvanecerá.
Mi amor por los míos, persistirá por siempre... en mi corazón.