Sigo hablándole al viento
y ni el eco me responde
todo fue un espejismo
y las palabras solo sueños.
Los recogía y guardaba
En la mochila de mi vida
los sueños que encontraba
y mis recuerdos guardé…
Un día al monte me fui
La llené con promesas rotas
De los sueños que guardé.
y al viento las arroje.
Y la brisa se los llevó
a través del tiempo.
Y el viento murmuraba
palabras que no entiendo.
De lugares lejanos
y de dulces sueños,
brisas de primavera
dormidas en invierno.
Luchando por ser libres
y etéreas como el viento.
y en su brisa permanecen
las palabras que no entiendo