Si tu pelo se llena de blancura,
en la época del tiempo ocioso,
de la jubilación a edad madura,
por los nietos seré un mentiroso.
Mi comportamiento, avaricioso,
Será de cariño de excesos y locura,
y mis juegos rozarán lo bochornoso,
y cogidos de la mano, mi atadura
Hablaré de ellos con placer y mesura,
de su cariño habré sido un moroso,
y siempre seré con mis nietos cariñoso.
Les contaré, mis sueños… con ternura.
Y cuando llegue mi tiempo de reposo…
Les dejaré, un recuerdo… hermoso